Los fundadores de Supreme Italia y Spain terminan en prisión tras numerosas denuncias, aun así al haber sido considerados «legal fake».
Multa de 10 Millones y 8 años de cárcel
Finalmente se hizo justicia y los propietarios de la empresa que abrieron tiendas en Europa y China, tendrán que cumplir la condena y pagar la multa por daños a la marca original.
El juez dictó que robaron la identidad de la marca Supreme y añadió que el negocio fue descarado y ofensivo. La marca falsificadora estuvo apunto de colaborar con empresas como Samsung y llegó tan lejos que obviamente iba a estar en el punto de mira al jugar de manera sucia.